La digitalización es un hecho. Nadie podría imaginarse en la actualidad un mundo sin smartphones, ordenadores o conexión a internet. Ocurre de igual forma en el ámbito de los negocios, en el que mostrar nuestros productos al gran escaparate que es la Red, está siendo cada día más necesario.
La llegada del boom digital ha supuesto un aumento sustancial en la oferta y ha hecho más exquisita a la demanda. El cliente, sabedor de su posición de poder en la compra, lo utiliza para obtener un mejor producto o servicio a un menor precio. Una herramienta esencial que ha llevado a este empoderamiento, ha sido el boca-oído. Más concretamente el digital (e-wom), ya que permite dar una opinión sobre una empresa, marca o producto de manera rápida y sencilla, que llegue a multitud de usuarios. El marketing digital ha jugado un papel esencial, y las redes sociales se convierten en el medio de difusión por antonomasia, con una capacidad de difusión superior a la de cualquier otro medio de comunicación.